La caída interior
Colección Los Conjurados
ISBN 978-958-9233-71-9
Obra Pictórica: Jim Amaral
Amparo Osorio. Poeta, narradora y ensayista. Ha publicado los libros: Huracanes de sueños (1983); Gota ebria (1987; Territorio de máscaras (1990); La
casa leída (Antologìa de autores universales, 1996); Migración de la ceniza (1998); Omar
Rayo, geometría iluminada (Entrevista, coautora, 2001); Antología esencial (2001); Memoria absuelta (2004); Estación profética (Antología personal,
2010); Oscura música (Antología,
2013); y la novela Itinerarios de la sangre ((2014). Fue Editora, durante los 20 años
de su aparición, de la revista cultural Común Presencia. Cofundadora y actual
Directora de la Colección Internacional de Literatura Los Conjurados. Varios de
sus poemas han sido traducidos al inglés, árabe, francés, italiano, portugués,
húngaro, alemán, rumano, ruso y sueco. Es cofundadora y Directora general del
semanario virtual Confabulación. Obtuvo la primera Mención del Concurso Plural
de México (1989), la beca nacional de poesía del Ministerio de Cultura de
Colombia (1994) y el “Premio Literaturas del Bicentenario” (2010), del mismo
Ministerio, por su libro Grandes Entrevistas de Común Presencia, del cual es
coautora.
Cálice
Yo estoy en donde estuve
entre los muros indecisos
del mismo patio de palabras
Octavio Paz
Mi memoria
Contaminada de espinas y de árboles lejanos.
La casa que nunca fue
la redondez de la fruta más triste
iluminada por el misterioso
Corazón de la luna.
Mi memoria galopante
Como una anunciación intraducible
Todavía despierta húmeda
En las neblinas de la albahaca.
La casa que nunca fue
la redondez de la fruta más triste
iluminada por el misterioso
Corazón de la luna.
Mi memoria galopante
Como una anunciación intraducible
Todavía despierta húmeda
En las neblinas de la albahaca.
Tatuaje
A mi hija, razón de vivir mi vida
Acudiremos a cada anunciación.
Al dictamen de las brújulas.
Al temblor de la herida
que todavía enseña
desdichas y rostros despojados.
Acudiremos a todas estas muertes equívocas.
Nacer será después
en otras derrotas,
en otros desencuentros.
Al dictamen de las brújulas.
Al temblor de la herida
que todavía enseña
desdichas y rostros despojados.
Acudiremos a todas estas muertes equívocas.
Nacer será después
en otras derrotas,
en otros desencuentros.
Invernal
A Chali
Oscurecía en los ojos de los árboles.
Yo aspiré entre su aroma
los llantos ocultos
de la última tempestad.
Y nada pude hacer contra ese invierno
que me azotaba el rostro.
No hay lucidez para el olvido.
Yo aspiré entre su aroma
los llantos ocultos
de la última tempestad.
Y nada pude hacer contra ese invierno
que me azotaba el rostro.
No hay lucidez para el olvido.
Tampoco hay esperanza.
Derechos reservados
© Amparo Osorio